Calas que ver en Mallorca
¿Imaginas estar en una playa con arena blanca y agua cristalina en Mallorca? La isla balear es famosa por sus impresionantes calas, aguas turquesas y entornos naturales que hacen que sea un lugar perfecto para los amantes de la playa.
Hay numerosas calas tranquilas con arena fina y aguas cristalinas, algunas de las cuales se encuentran en el Parque Natural de Mondragó, como Cala Mitjana, Cala Tuent, Torrent de Pareis, Cala Deià, Cala s’Almunia, Cala Figuera, Caló des Moro, Cala Torta y Cala Ratjada.
En este artículo descubrirás las calas más impresionantes de Mallorca, desde sus hermosas playas de arena blanca hasta sus aguas cristalinas y entornos naturales.
Las mejores calas que ver en Mallorca
Con más de 200 opciones donde la arena fina se une a las aguas cristalinas, Mallorca es un verdadero paraíso para los amantes de las calas.
Parque Natural de Mondragó
En el Parque Natural de Mondragó, ubicado en la costa este de Mallorca, encontramos uno de los ejemplos más encantadores de calas con aguas cristalinas y fina arena blanca.
Cala Mondragó destaca por su belleza natural y su ubicación privilegiada, ofreciendo una atmósfera tranquila y apacible que seduce a los visitantes.
Además, el parque es un área de especial interés para la observación de aves, convirtiéndolo en un lugar predilecto para los amantes de la naturaleza.
Otra joya oculta dentro de este parque es la playa de SAmarador, una alternativa más recóndita y tranquila, con panoramas inolvidables para los buscadores de serenidad.
Cala Mitjana
En el sur de Mallorca y cerca de Portocolom, se encuentra Cala Mitjana, una joya escondida que, a pesar de su acceso algo complicado, recompensa a sus visitantes con un entorno de ensueño y aguas de tonalidad turquesa.
La cala, pequeña y rodeada de verde vegetación, es perfecta para aquellos que desean relajarse lejos del bullicio, explorar la vida marina practicando snorkel o disfrutar de una experiencia en kayak.
Su aislamiento la hace especialmente atractiva para quienes buscan tranquilidad y un contacto más íntimo con la naturaleza mallorquina.
Cala Tuent
Cala Tuent, situada en la remota costa noroeste de Mallorca, es un espectáculo natural donde el paisaje marino se funde con las imponentes montañas y acantilados de la Sierra de Tramuntana.
A pesar de su agua fresca y cristalina, perfecta para el baño y el buceo, lo que realmente la distingue es su tranquilidad y la belleza de su entorno, un paraíso menos transitado que se alza como un lugar ideal para quienes anhelan sosiego y aislamiento.
Torrent de Pareis
El Torrent de Pareis es una experiencia única para todos aquellos que se aventuran por la espectacular carretera que atraviesa la Sierra de Tramuntana.
Al llegar a Sa Calobra, se encuentra esta playa rodeada de impresionantes acantilados que envuelven las aguas cristalinas.
Acceder por barco desde Sóller añade al encanto de llegar a este santuario natural, ofreciendo una perspectiva diferente de la escarpada costa norte de Mallorca.
Torrent de Pareis es el destino soñado para los enamorados de la naturaleza y la tranquilidad.
Cala Deià
La más bohemia de todas, Cala Deià, ubicada bajo el pueblo del mismo nombre, encierra entre sus rocosas orillas un aire inspirador que incluso los grandes escritores han sabido apreciar.
Aunque la zona cuenta con lujosos alojamientos, también ofrece refugios como Can Boi para quienes buscan vivir la experiencia sin grandes pretensiones.
Tranquila y serena, con sus aguas cristalinas y paisajes de la Sierra de Tramuntana, esta cala es un retiro perfecto para desconectar y respirar la paz mediterránea.
Cala s’Almunia
Cala s’Almunia es una preciosa cala situada en Santanyí, en el sureste de Mallorca. Aunque posee poca arena, se caracteriza por sus imponentes acantilados y un entorno natural que emociona a quienes la visitan.
Es ideal para aventureros, contando con rocas desde las que se puede saltar al mar cristalino. El acceso a Cala s’Almunia es servido por un aparcamiento compartido con Caló des Moro, a unos 10 minutos a pie, y se recomienda llegar temprano para asegurar un lugar debido a su alta popularidad.
Cala Figuera
Cala Figuera, no confundir con el puerto pesquero del mismo nombre, es una bahía encantadora ubicada a 13.4 kilómetros del Puerto de Pollença.
Aunque su acceso implica una caminata de 1.5 km por un camino empinado, este esfuerzo se ve recompensado con una cala de fina arena blanca rodeada de acantilados y unas aguas que reflejan con claridad la fauna local.
Un punto distintivo de Cala Figuera es su pasado como puerto de pescadores, visible en las tradicionales casas blancas que adornan el paisaje.
Caló des Moro
Caló des Moro es conocida por estar entre las calas más bellas de Mallorca.
Con una estrecha franja de arena blanca y fina y aguas azules profundas, es un destino espectacular para los amantes de las calas tranquilas.
El acceso es a pie, a través de un camino con escaleras de tierra que parte del aparcamiento, recompensando al visitante con un escenario de inigualable belleza natural.
Para evitar las multitudes se recomienda llegar muy temprano en temporada alta y, debido a la falta de servicios, llevar lo necesario para pasar el día.
Cala Torta
Cala Torta, en el norte de Mallorca, es una playa amplia y salvaje con arena blanca y aguas transparentes, rodeada de vegetación típica mediterránea y acantilados.
Su acceso, aunque algo irregular, permite llegar en vehículo directamente hasta cerca de la playa. Es un lugar idóneo para quienes buscan huir de la masificación y entregarse a la calma de su entorno natural.
Cala Torta invita también a explorar sus vecinas Cala Mitjana y Cala Estreta, a las que se puede acceder fácilmente a pie.
Cala Ratjada
Situada en la punta oriental de la isla, en Capdepera, Cala Ratjada es una zona que destaca por sus múltiples calas de arenas blancas y aguas cristalinas.
El área es perfecta para aquellos que quieren disfrutar del mar en un ambiente sereno, alejado del bullicio de las playas más concurridas.
La cala Estreta, en particular, es un rincón excelente para el snorkel y deleitarse con la variedad de azules del mar.
Con una atractiva oferta gastronómica y accesibilidad en vehículo, es importante llegar temprano para apreciar toda la tranquilidad que el lugar tiene para ofrecer.
Playas de arena blanca y aguas cristalinas
Mallorca es un destino que enamora gracias a sus playas de arena blanca y aguas cristalinas, capaces de transportarte a lo que parece un trozo del paraíso en la tierra. Los visitantes podrán disfrutar de una diversidad de calas que combinan la belleza de las aguas turquesas con entornos naturales.
Entre las mejores calas destacan Cala Mondragó, con su arena fina y ubicación en un parque natural que realza su belleza, y Cala Mesquida, una preciosa cala rodeada de dunas y pinos. No menos impresionante es Cala Agulla, en Cala Ratjada, que ofrece un extenso lienzo de arena blanca donde el sol baña las aguas tranquilas y transparentes.
Para los que buscan un refugio más íntimo, Cala Llombards y Cala Varques son elecciones ideales. Su arena suave y aguas cristalinas, abrazadas por las rocas, crean una atmósfera de calma y exclusividad.
Estas playas constituyen tan solo una muestra de las mejores playas de Mallorca, las cuales comparten el común denominador de aguas limpias y resplandecientes que hacen que un día de playa se convierta en una experiencia inigualable.
Calas tranquilas y arena fina
Mallorca alberga algunas de las calas más hermosas y serenas del Mediterráneo, ideales para aquellos que buscan tranquilidad y playas de arena fina.
Estos pequeños paraísos costeros, rodeados de naturaleza y aguas cristalinas, son el refugio perfecto para desconectar y sumergirse en la paz que la isla ofrece.
| Cala | Destacado por |
|---|---|
| Cala Mondragó | Arena fina, Parque Natural |
| Cala Mesquida | Entorno natural, arena blanca |
| Cala Agulla | Amplia playa, aguas tranquilas |
| Cala Llombards | Cala íntima, aguas cristalinas |
| Cala Varques | Acceso limitado, naturaleza pura |
Aguas turquesas y entornos naturales
Las calas de Mallorca son un regalo para los sentidos, especialmente por sus vibrantes aguas turquesas que contrastan con un entorno natural prácticamente virgen.
Estos rincones de paz están custodiados por escarpados acantilados y una vegetación que les otorgan protección contra los vientos, manteniendo así su carácter idílico e intacto.
Al nadar en estas aguas o simplemente al admirarlas desde la costa, uno no puede más que sentirse parte de un sueño, una realidad donde la naturaleza ofrece su versión más sublime y serena.
| Cala | Ubicación | Características |
|---|---|---|
| Cala Mondragó | Parque Natural de Mondragó, este de Mallorca | Aguas cristalinas, arena blanca, tranquilidad y observación de aves |
| Cala Mitjana | Cerca de Portocolom, sur de Mallorca | Entorno natural, aguas turquesas, acceso restringido |
| Cala Tuent | Costa noroeste de Mallorca | Aguas cristalinas, playa virgen, paisaje de montaña |
| Torrent de Pareis | Sa Calobra, Sierra de Tramuntana | Playa de gravas, rodeada de acantilados, acceso por una ruta espectacular |
| Cala Deià | Norte de Mallorca, bajo el pueblo de Deià | Aguas cristalinas, entorno rocoso, inspiración bohemia |
Caló des Moro, Cala deia, y Cala Figuera destacan por ofrecer tranquilidad y una comunión privilegiada con la naturaleza, mientras que la famosa Cala Mondragó, en el Parque Natural de Mondragó, hechiza con su biodiversidad y playas de arena blanca.
Para aquellos que buscan calas más secretas, Cala Mitjana y la remota Cala Tuent invitan a una escapada a lugares menos conocidos pero de igual belleza. En contraste, Torrent de Pareis impresiona con su majestuoso cañón, siendo un espectáculo de la naturaleza por sí solo.
Ya sea deseando un día de relax en aguas tranquilas, una aventura en entornos salvajes, o simplemente contemplar vistas impactantes, Mallorca satisface todas las expectativas.
Cala Ratjada ofrece además posibilidades para el snorkel y gastronomía local para los que buscan un toque extra en su experiencia playera.
Con tanta diversidad, Mallorca es ideal para descubrir tu cala perfecta, un lugar donde el tiempo se detiene y el Mediterráneo cobra vida.
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